Joaquín Cordua
A pesar de que el Gobierno fue uno de sus fundadores, la Fundación Chile fue concebida desde un primer momento como una entidad autónoma de derecho privado, que funcionaría con independencia del aparato estatal.
La ley que la creó le otorga plena capacidad para realizar toda clase de actos y contratos en forma autónoma.
El Consejo Superior Directivo, cuerpo encargado de establecer las políticas y supervisar la labor ejecutada por la institución, es nombrad paritariamente por ambos fundadores, es decir, 6 títulos y 6 suplentes por el gobierno de Chile y lo mismo por la ITT. Diez de los doce consejeros titulares forman parte del Consejo a título personal y dos por los cargos que desempeñan. Esto último se hizopara facilitar la coordinación de las actividades de la Fundación con las de otras instituciones tecnológicas nacionales. Por ello los estatutos establecen que el Vicepresidente de la Corporación de Fomento de la Producción (principal agencia pública de desarrollo) y el Presidente de la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (Conicyt) integran el Consejo de la Fundación Chile en representación del Gobierno.
La Fundación Chile, al igual que todas las personas jurídicas de su condición, se relaciona con el Gobierno a través del Ministerio de Justicia.
La autonomía de la Fundación, que ha resultado decisiva para su desarrollo, se ha visto reforzada por el amplio financiamiento con que ha contado desde su creación para realizar sus actividades. Dispone para ello de un patrimonio importante aportado por sus fundadores, no teniendo que depender de partidas en el presupuesto público o de contribuciones de entidades privadas, normalmente restringidas y poco estables en el tiempo.
Por otro lado, la Fundación, siempre que lo ha requerido, ha podido recurrir a su nexo con el Gobierno para resolver problemas propios de su operación.
Una de las características del modelo institucional de Fundación Chile ha sido su fuerte especialización en los sectores de la economía seleccionados durante sus primeros años de operación, sobre la base de ventajas comparativas y competitivas, tanto de la institución como del país. Dentro de esos sectores su labor ha estado orientada fundamentalmente por las señales del mercdo. Eso fue, en su momento, un concepto novedoso en el país, ya que en el ámbito del desarrollo tecnológico y de la transferencia tecnológica se aplicaban principalmente orientaciones políticas derivadas del concepto de “necesidades estratégicas” del desarrollo nacional.
Hoy la Fundación Chile aporta tecnologías y servicios a tres de los sectores de mayor dinamismo y potencial de crecimiento de la economía chilena: Agroindustrial, Forestal y Recursos Marinos. Ha logrado prestigio en dichas áreas y una de sus ventajas comparativas nace justamente de dicha especialización.
Para transferir tecnologías al país la Fundación Chile emplea tanto métodos tradicionales, tales como la difusión, la capacitación y el dar asistencia técnica a empresas existentes, como el suyo propio: lacreación de empresas demostrativas, mecanismos sobre el que se proporciona mayor información en el Anexo adjunto.
En síntesis, los principales medios de acción que utiliza la Fundación para transferir tecnología son:
La difusión. Incluye seminarios en sus diversas áreas de especialización y publicación de tres revistas periódicas especializadas que dan a conocer nuevos conocimientos científicos y tecnológicos, así como técnicas de gestión empresarial y oportunidades baadas en nuevas tecnologías.
Capacitación. Cursos y talleres, dictados por la institución, sobre temas relevantes a sus áreas de especialización.
Asistencia Técnica. Principalmente para el desarrollo y comercialización de nuevos productos y procesos productivos, mediante contratos de servicios.
Control y Certificación de Calidad. Es una de las actividades de mayor desarrollo en la Fundación, tanto por la magnitud de los ingresos que aporta, como por el gran conocimiento y prestigio que le ha significado en el sector productivo.
Creación de empresas demostrativas de nuevas tecnologías. Esta modalidad consiste en crear una empresa productiva con el objeto de demostrar las ventajas técnicas y económicas de utilizar una tecnología que aún no es empleada en el país.
Creación de grupos de intercambio tecnológico. Proyectos tecnológicos ejecutados por agrupaciones de empresas interesadas en el problema específico.
Desarrollo empresarial. En 1990 se dio comienzo a un programa de apoyo a la formación y desarrollo inicial de pequeñas y medianas empresas de base tecnológica (Empretec). El programa transfiere y difunde metodologías de estímulo del espíritu emprendedor y de refuerzo de la capacidad empresarial, recientemente desarrolladas y probadas en EE.UU. y Europa. Estas incluyen sistemas de identificación de las personas que poseen mayor potencial empresarial, así como también técnicas de motivación, capacitación y asistencia durante la etapa de puesta en marcha de las nuevas empresas.
La Fundación cuenta con uno de los servicios de laboratorio más modernos de Chile. Ellos están orientados a satisfacer las neecsidades del mercado nacional, un 50% de las cuales corresponden a productos destinados a la exportación y el resto al consumo interno.
Todos los análisis que se realizan tienen carácter confidencial para asegurar plena reserva de los resultados.
Los laboratorios de Fundación Chile están reconocidos por los organismos oficiales del gobierno chileno y por instituciones extranjeras tales como el South African Bureau of Standards y la Food and Drug Administration de los Estados Unidos de América.
Los servicios de laboratorio están organizados en tres unidades: Area Química, Area de Cromatografía y Area de Microbiología, las que ofrecen principalmente los siguientes servicios:
El acuerdo inicial que creó la Fundación estipuló que durante los primeros 10 años de actividad, la administración de la Institución sería contratada a la ITT Corporation. Ello determinó que tanto el personal directivo com olos primeros técnicos que trabajaron en la Fundación fuesen seleccionados por dicha corporación. Se estableció, además, que la ITT capacitaría a los profesionales chilenos para que éstos reemplazaran gradualmente a los especialistas extranjeros.
Desde su creación una política permanente de la Fundación Chile ha sido contratar a profesionales de alta competencia, que tengan experiencia en empresas privadas y, de preferencia, también en el medio internacional.
El trabajo de los profesionales de la planta es complementado por numerosos consultores nacionales y extranjeros de alto nivel. Estos son contratados mediante convenios a honorarios para proyectos específicos y por períodos limitados. En algunos proyectos el número de consultores supera al de los profesionales de la planta permanente de la Fundación Chile.
Los recursos físicos de la Fundación Chile están constituidos por su sede central en Santiago y la sede regional en la ciudad de Concepción, segunda zona industrial del país e importante centro de desarrollo forestal y pesquero a 515 kilómetros al sur de Santiago. Además, la Fundación cuenta con laboratorios en Puerto Montt; con unidades de control de calidad en las áreas de producción y embarques de exportación y con las instalaciones de producción de las diversas empresas filiales creadas como parte de su labor de transferencia tecnológica.
La sede central de la ciudad de Santiago alberga, además de las instalaciones de la Direción General y de los departamentos, una planta piloto para procesamiento de alimentos, laboratorios químicos y microbiológicos, una biblioteca técnica, un amplio auditorio con modernas instalaciones audiovisuales, numerosas salas de reuniones y una cafetería. La superficie construida en este recinto es de 6.000 m2 en un terreno de 48.000 m2 de extensión.
En los laboratorios y la planta piloto se efectúa gran parte de la actividad de investigación aplicada y desarrollo y los diversos servicios de análisis que provee la Fundación.
La infraestructura descrita corresponde a la que usa exclusivamente la Fundación y no incluye las instalaciones de las empresas filiales que también son utilizadas, en alguna medida, en sus proyectos.
La infraestructura y los sistemas de apoyo a la labor del personal son modernos y se actualizan permanentemente.